Para medir el aislamiento acústico de un material -como por ejemplo las cortinas acústicas o los materiales de construcción- se emplea el índice de reducción acústica (R). Dicho índice se puede definir cómo la diferencia existente entre el nivel de presión sonora que existe en el recinto respecto al exterior. Es decir, el nivel de ruido que puede reducir el material, expresado en decibelios.